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Esclarecer
hasta dónde nos lleva el impulso
de atravesar la calle
Más que surcar el aire
pernoctar en el vacío
Ese espacio que existe
¿desde que tiempo?
Nadie estuvo en el principio
o tal vez todos en uno sólo
Dios somos todos
Y todos el lenguaje
Mis palabras no son mías
y eternamente se transforman
Ser vivo que se retuerce
cuando el que escribe
encuentra un nuevo cabo
agítalas
arráncales el rabo
—chillen putas— (¿se acuerdan de ese entonces?)
Mirar al semáforo
El vaivén de la genteen este océano
y un joven contempla la caída de la tarde
descifra el mensaje atravesado en las sombras
se acerca al borde
azotea
y se arroja
El mar se agita
Labios recién alimentados
Escila y Caribdis
¿Estuvieron desde cuándo?
Siguen aquí
Helena y Aquiles
tomados de la mano en plaza galerías
Paris hinchado de celos
poseido por el dios solar
apunta su dardo
y dispara
La flecha atrapa en vuelo al joven que cae
de su azotea
y la caída de las sombras arrastra
al dios solar
Helena y Aquiles siguen tomados de la mano
Y ajeno hasta este instante
un fotógrafo captura
la caída, el instante
incluso se captura
a si mismo
Esclarecer
La noche
La caída
El instante
Respirar
Morir

Ser Dios